Durante el periodo navideño, gracias a un regalo familiar, he estado leyendo “Desde La Penumbra” el libro de Antonio Martín, que recoge los textos publicados en los cómics de la Línea Eclipse, dentro del sello Cómics Fórum de Planeta de Agostini. En él, habla el autor sobre su día a día en las oficinas de Cómics Fórum, y su relación con la industria y sobre todo con los teóricos, casi convirtiéndolo en un “confesionario”. Recuerdo haber leído aquí y haya alguno de los textos en alguno de los cómics Eclipse. La verdad es que, si no los lees todos seguidos, no tienen mucha enjundia, pero el libro, recopilándolos te abre una ventana a la industria del cómic español de principios de los noventa. Se divide en un preámbulo de Carlo Pacheco, una introducción más o menos personal o histórica de los textos que se publicaron en esa línea, los textos y un resumen de lo que fue su carrera tras la Línea Eclipse. Jaume Vaquer termina con un texto el libro.
Me ha llamado mucho la atención constatar que los problemas
de los años 90 azotaban la industria del cómic -odios, envidias, luchas
intestinas por un pedacito de la madalena que era la industria del cómic
entonces- continúan en este momento de plena actualidad. Sí, las redes sociales
y las tecnologías han cambiado muchas cosas, pero la relación personal no ha
cambiado.
Soy consciente que hay “fuerzas” externas a la industria,
que alteran las decisiones de aquellos que pueden dar una solución a muchas
cosas. Y yo no conozco la fórmula mágica que solucione la situación donde nos
encontramos, ni la que se encontraban en los noventa.
Mi opinión no es relevante, pero si a alguien le interesa
leerla, sin ningún tipo de interés de molestar a nadie, tengo claro que el
Manga es un buen producto, bien pensado tanto artística como empresarialmente.
Características que deberían estudiarse antes de lanzar un producto a un
mercado, tan saturado como el español o el norteamericano.
Ánimo y adelante.
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