martes, 30 de julio de 2019

News Noticias 30.07.19 (analisis) ¿Amazon editor en Francia?..

Un nuevo paso en la dominación mundial de Amazon en la distribución empieza a preocupar en la industria francesa del BD.

Mientras en Italia, Amazon se lanza a distribuir libros para libreros con los reclamos de un amplio catálogo de títulos, descuentos comparables a los de los editores y sin cargo de devolución, empieza a producir cambios en la estructura industrial del libro en Italia. 

Los Franceses ven la situación llegar a sus puertas y lo analizan: ¿Primero como se distribuye el dinero de la producción de un BD actualmente en nuestro país vecino? Según el ministerio de cultura, autor 8%, punto de venta 36%, editor 21%, distribuidor 12%, difusor 8% e imprenta 15%. A todo esto hay que sumarle que el  IVA es un 5.5% del precio, y esto no entra en el computo anterior. 

La mayor cantidad se la queda el punto de venta. Parece mucho, pero es justificado, ya que ha de pagar sueldos, alquileres, la inmovilización financiera sustancial (el stock de libros). Después esta el editor, que nuevamente paga salarios, alquileres y gastos de promoción, investigación y desarrollo, despliegue comercial en el extranjero y mercados derivados. La imprenta es el tercer porcentaje donde también hay salarios, alquileres y costos de papel, etc... El 15% es un promedio que fluctúa entre 1000 y 100000 copias. Pero este promedio se reduce porque los BD's tiran menos pero su producción en tapa dura es igual de cara. Las dos siguientes son la transmisión y la distribución: La transmisión es el acto de venta: el representante va a los puntos de venta para hacer la promoción del producto. Cada distribuidora tiene una cantidad de comerciales, por ejemplo Hachatte tiene un ejercito de comerciales, mientra que Makassar tiene un puñado de comerciales que a menudo realiza su trabajo por correo o telefónicamente. Hay grupos editoriales como Delcourt of Glénat que tiene su departamento de ventas, pero los pequeños y medianos editores contratan una emisora como Makassar. El distribuidor es quien almacena los libro, enviándolos cuando los piden, haciendo facturas y hace las devoluciones. Grupos como Hachette, Gallimard o Média-Participations, tienen grandes y costosas infraestructuras, que se amortizan en décadas. 

Y aunque Amazon también es un librero, que tiene un 17,3% de la cuota de mercado francés de libros, los libreros tradicionales podrían elegir Amazon y ahorrar el costo de la devolución, con un gran fondo y un pedido entregado en un día. Amazon realmente amenaza el trabajo del distribuidor. Pero también podría hacerlo el editor, eliminando el costo de la distribución. Pero todo esto tendría como resultado que los libreros y los puntos de venta "alimentarían" a su peor competidor. ¿Quién evitará que un dibujante se dirija a Amazon en el futuro? La empresa norteamericana podría pagar mas al autor, con mas fuerza con un sistema mas fuerte. O no, porque no se les conoce a los gigantes de las nuevas tecnologias por su mentalidad abierta y por su ética.


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