Nada puedo decir que no se haya dicho ya de Mike Zeck. Mike nació en Greenville, Pennsylvania y asistió a la Escuela de Arte de Ringling en 1967. Después de graduarse trabajó en el Centro de Educación para Migrantes de Fort LAuderdale, Florida, hasta que tomó los lápices y empezó a trabajar como artistas secuencial en 1974 donde trabajo en Charlton Comic. En 1977 empieza su carrera en Marvel, donde trabajo en seríes como Spider-Man, Captain America, o The Punisher. En 1984 dibujo la Secret Wars. Tras su marcha de la casa de las ideas, Zeck trabajó en DC Comics.
Ayer, mi amigo de FB Massimo Dall'Oglio escribió una entrada que decía "Así que si he entendido bien, Amazon distribuirá cómics en Italia con posibilidad de devolución y sin gastos de envío. Y tengo entendido que también quiere fabricarlos...". Hay que tomarse muy en serio esta situación en el país transalpino, porque encontré ya los primeros intentos de desestabilizar la compañía. Decía la noticia que el New York Times, publicó un artículo el lunes señalando la disponibilidad en Amazon de la adquisición de libros falsos. Allí el escritor dijo que Amazon es "un lugar donde las leyes de derechos de autor tienen una influencia notablemente pequeña" a lo que ha respondido el gigante tecnológico que los libros que nos proporcionan las editoriales son legales, pero que el verdadero problema tiene que ver con "la diferencia en el tiempo de copyright entre países".
David Streitfeld escritor del artículo hablaba de que varios libros que había comprado a través de la compañía, habían sido impresos en los USA y son "falsificaciones".
Frente a eso, el portavoz de la compañía dijo "no existe una única fuente de verdad para el estado de los derechos de autor de cada libro en todos los países en que los minoristas podrían usar para verificar el estado de los derechos de autor, y Amazon trabaja con los propietarios de los derechos para resolver rápidamente las preguntas sobre qué editor tiene qué derecho de propiedad intelectual de las obras que representan. Hemos eliminado estos títulos de nuestra tienda de USA. Y hemos informado a los editores y distribuidores que los enumeraron".
Acusaciones como esta van a por la imagen de la compañía tecnológica. Pero lo que prepara Amazon como distribuidora y vendedora, puede llevar a la destrucción del tejido editorial mundial.
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